Al inicio de esta misma noche, a las 22:02 horas, una Patrulla de la Policía Local entraba en una estación de servicio de la Avenida de Madrid.
La reseñada tiene dos accesos, uno principal desde la propia Avenida y otro auxiliar, desde una calle accesoria.
Desde la principal, hay habilitada una zona de estacionamiento, pegada al muro de una finca que linda con la propia estación.
En ese punto, los vehículos aparcan en diagonal, por lo que situando un turismo, lo más alejado posible del acceso a la Avenida, los demás vehículos lo ocultan.
Concretamente en esa ubicación, los Agentes observaron un furgón, en cuyo interior un varón se encontraba semi sentado, en la parte trasera, agazapado y manipulando algún elemento situado en el reposapiés. Comportamiento que levantó la sospechas de la Patrulla. Uno de los Actuantes se acercó sigilosamente, comprobando que el aludido estaba tan concentrado en su labor, que ni se percató de su presencia, en todo caso, con anterioridad cuando levantaba la vista, dirigía su atención al acceso desde la Avenida. El Agente observó claramente como el aludido estaba manipulando una balanza de precisión, pesando en ese instante una bolsa de reducidas dimensiones de color transparente, cuyo contenido con toda probabilidad era una sustancia estupefaciente de color marron, preparando en ese momento una dosis para su venta.
En el mismo asiento, había dos bolsas plásticas, una azul y otra transparente, así como unas tijeras, empleadas presumiblemente para cortar las bolsas en pequeñas trozos cuadrados, en los que introducir las dosis elaboradas, tras su pesaje.
Procedieron a la identificación del citado de Porriño y 48 años de edad, manifestando ser el propietario del turismo pero no el conductor.
Se le ordenó apearse del vehículo, procediendo al cacheo del mismo, encontrando en ese momento en el asiento en el que estaba el ahora detenido, una bandolera que manifestó era de su propiedad, en cuyo interior tenía la cantidad de 260 euros y 9 pastillas de metadona.
También tenía 5 dispositivos de telefonía móvil, manifestando que todos ellos eran de su propiedad.
El vehículo tenía en el maletero un estuche de grandes dimensiones, que contenía un taladro y una amoladora, encontrando entre la tapicería y la chapa un hueco, con una bolsa que contenía un reloj y varias cadenas de oro, material que le fue requisado al no acreditar en modo alguno la propiedad ni la procedencia del mismo.
En una búsqueda más exhaustiva, se encontraron en la espuma del asiento trasero derecho, un corte debajo del tapizado, en cuyo interior, ocultos estaban un envoltorio de papel aluminio y otro de papel blanco con alguna sustancia estupefaciente por determinar.
La gomaespuma del respaldo del copiloto, presentaba otro corte, en cuyo interior había otra pequeña bolsa de plástico de color azul que contenía 9 gramos de heroína.
En el mismo lugar, pero esta vez en el respaldo del piloto estaba oculta otra báscula de precisión.
Así mismo, por distintos recovecos del vehículo tenía esparcidas un total de 19 pastillas de metadona, de 60, 30, y 20 miligramos de distintos lotes.
En virtud a todo el material localizado, y que fue ocupado por los Agentes, procedieron a la detención del varón por la comisión de un presunto delito contra la salud pública.
El conductor se encontraba en la estación de servicio, comprando un refresco, también de Porriño y 46 años de edad, que fue sometido a un control de drogas, arrojando este un resultado positivo en meta anfetaminas, heroína y cocaina.Se cursó la correspondiente denuncia por este hecho, y se procedió a la retirada del vehículo al deposito municipal, al no haber un conductor habilitado para hacerse cargo del mismo.
A mayores, ambos fueron denunciados administrativamente por haber vulnerado las limitaciones de desplazamiento establecidas a consecuencia del estado de alarma.
