- La conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, destaca la importancia de la «planificación para atajar los riesgos» derivados de los eventos meteorológicos adversos
- El presidente destaca que para prevenir desbordamientos, Galicia cuenta con un «pionero sistema de alertas tempranas» y una red de medidores del caudal de los ríos que se duplicó en los últimos meses hasta llegar a cerca de un ciento
- En las áreas con riesgo potencial significativo de inundación, la Xunta está ejecutando obras y medidas de protección específicas por un importe de cerca de 11 M€ y planifica nuevos proyectos de la mano de los ayuntamientos con un coste estimado en 20 M€
- En el apartado de la restauración hace falta destacar los 2,7 M€ para labores de conservación fluvial y la apuesta por la creación de áreas de inundación controladas en zonas urbanas, espacios diseñados para retener grandes cantidades de agua en casos de lluvia intensa y con capacidad para integrarse en futuros corredores verdes
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció hoy que el Gobierno autonómico tiene reservados en los presupuestos de 2025 «más de 35 millones de euros para planificar y poner en marcha» diferentes medidas para hacer frente a los riesgos de inundación dentro del ámbito de la cuenca hidrográfica de Galicia-Costa.
El objetivo, tal y como explicó, es que la comunidad «esté preparada para actuar» ante los eventos adversos de la metereología y recordó que Galicia lleva años trabajando para «prevenir y minimizar los riesgos de inundaciones». En la misma línea, la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, resaltó la importancia «de la planificación para atajar» los posibles impactos de este fenómeno y garantizar que «en la tierra de los mil ríos, los ríos no sean un obstáculo».
El Consello evaluó hoy un informe donde Augas de Galicia expone su estrategia ante los riesgos de inundaciones, con un paquete de actuaciones que abarcan medidas preventivas para evitar o minimizar los desbordamientos, acciones destinadas a proteger las áreas más sensibles a las inundaciones y trabajos de restauración ecológica y conservación tanto en los canales como en los contornos fluviales con el mismo fin.
En el apartado preventivo, Aguas se apoya en el modelo Merlín, un sistema «pionero de alerta temprana de riesgos» de inundación en Galicia-Costa que desarrolló en colaboración con la Universidade da Coruña, según explicó Rueda. Gracias a esta herramienta «se puede prever a 3 días vista el posible desbordamiento de los ríos» en la cuenca autonómica con base en las predicciones de Meteogalicia y de la Aemet «entre otros datos» y «establecer las correspondientes alertas» hidrológicas.
Con el mismo objetivo – anticiparse a posibles episodios de desbordamientos- el organismo hidráulico también dispone de una completa red de medición de caudales que permite conocer los niveles de los ríos principales en tiempo real. «El sistema de medición de caudales de Galicia-Costa se duplicó en los últimos meses hasta llegar a las 95 estaciones de control», indicó el presidente, con una inversión de 0,7 millones de euros anuales por parte de la Xunta para garantizar su buen funcionamiento.
Además, tal y como explicó la conselleira, para consolidar Galicia como un territorio más preparado para afrontar los riesgos derivados de las inundaciones, «se seguirá apostando por la divulgación (con un presupuesto de 0,7 millones en 2025) a través de la señalización de las áreas de riesgo y del desarrollo de actividades educativas en centros escolares o campañas de comunicación».
Como novedad, se proponen también la creación de corredores fluviales verdes con el fin de emplear la vegetación de ribera para reducir el riesgo potencial de inundación en zonas sensibles. La idea es mantener y reforzar la vegetación propia de estas áreas, medida que hace que en caso de avenidas los canales se mantengan estables y no lleven tierra hacia las desembocaduras, y además, habilitar accesos peatonales que permitan que su conservación sea más sencilla.
En materia de protección, precisamente, las acciones de Augas de Galicia se centran en aquellos puntos más vulnerables a episodios de lluvias intensas, es decir, en las áreas de riesgo potencial y significativo de inundación (ARPSI). El organismo hidráulico tiene en ejecución o prácticamente finalizadas una serie de obras que buscan proporcionar más espacio a los ríos o bien renaturalizar sus contornos en los ayuntamientos de Valga, Oia, Carballo y Catoira, con una inversión de casi 11 millones de euros.
A estas actuaciones ya en marcha se sumarán, según informó la conselleira, otras nuevas localizadas en estas y en ARPSI diferentes de Galicia-Costa a su paso por los «municipios de Viveiro, Ponteceso, Neda, Sada o Padrón». Con un coste total estimado en cerca de 20 millones de euros, Augas de Galicia ultima los acuerdos que garantizarán la licitación y ejecución de estos trabajos en colaboración con los respectivos ayuntamientos, que también tienen competencias en la materia.
Plan de conservación y mantenimiento fluvial
Por último, en el apartado de restauración fluvial, hace falta destacar la labor continuada que realiza el organismo hidráulico autonómico y que se traducirá el año que viene en 2,7 millones de euros destinados a realizar trabajos de conservación y mantenimiento fuera del ámbito urbano y primando aquellas áreas con un riesgo potencial de inundación.
La responsabilidad de mantener los espacios fluviales en condiciones idóneas es compartida con las administraciones locales, por lo que la Xunta fue pionera en facilitarles su labor al autorizar este tipo de trabajos mediante una simple declaración responsable.
Asimismo, en el caso de ciudades y ámbitos más urbanos, el objetivo no es solo reducir la amenaza de posibles desbordamientos, sino que las actuaciones que se van a realizar estén integradas con el contorno. En este sentido, Augas de Galicia apuesta por la creación de áreas de inundación controladas, una fórmula aplicada con éxito en otras comunidades y que consiste en habilitar espacios capaces de retener grandes cantidades de agua en caso de lluvia intensa y con un valor ambiental que les permite también integrarse en futuros espacios verdes.
Nueva planificación 2028-2033
Todas estas medidas en el ámbito de la prevención, protección y restauración vienen marcadas y definidas por un trabajo de planificación previo, que se revisa y actualiza cada seis años. Así, tal y como explicó Rueda, el actual Plan de gestión del riesgo de inundación (PXRI) 2021-2027 de la demarcación Galicia-Costa identifica «un total de 198 áreas con riesgo potencial significativo de inundación fluviales (170) y costeras (28), de las que 47 están consideradas de riesgo elevado».
Esas zonas se reparten en cuatro grupos, según el nivel de riesgo, y en el cuarto se incluyen los casos más graves, que son en los que está actuando Augas de Galicia de la mano de los ayuntamientos. La conselleira explicó que ya se está trabajando en el próximo Plan, que elevará a «172 las áreas de riesgo y pasará de 548 kilómetros a 566».
Hace falta recordar que el actual Plan de gestión del riesgo de inundación es el resultado de un exhaustivo estudio en tres fases, que se tienen que repetir cíclicamente, de las zonas más sensibles a episodios de intensas lluvias dentro de Galicia-Costa. La primera consiste en determinar las áreas del territorio con un riesgo potencial significativo de inundación, es decir, en las cuales ese riesgo se considera probable.
El segundo paso es la elaboración de mapas de peligrosidad y riesgo de inundación, en los cuáles se establece el posible alcance de esos desbordamientos atendiendo a distintos escenarios al tiempo que se hace una relación de los elementos susceptibles de verse afectados por ellos, como pueden ser, entre otros, la población, actividades económicas e industriales, zonas protegidas, monumentos, colegios o hospitales. En la última y definitiva fase se elabora el propio plan, que define las líneas básicas para prevenir y minimizar los riesgos.
Se trata de un trabajo continuo y que requiere de una constante actualización como demuestra el hecho de que la Xunta, al tiempo que trabaja en la ejecución del PXRI 2021-2027, ya inició hace varios meses a tramitación de cara a la elaboración del siguiente plan de gestión, que marcará la hoja de ruta a seguir en este ámbito durante el período 2028-2033.
Así, el pasado mes de agosto se abrió la consulta pública del documento en el cual se recoge el estudio de evaluación preliminar de riesgos para identificar las ARPSI de Galicia-Costa y hace unas semanas se licitó la elaboración y revisión de la cartografía de inundabilidad correspondiente a la cuenca autonómica, que se llevará a cabo el próximo año por un importe estimado de 0,3 millones de euros.